Hacer rodar este aro metálico mientras caminamos y lo sujetamos con la guía es más difícil de lo que parece.
Este juguete nos transportará a nuestra infancia y a la de nuestros padres y abuelos, ya que es un juego con más de 3000 años de antigüedad.
Es ideal para que los más pequeños aprendan a concentrarse y a desarrollar la precisión.
Consiste en un simple aro metálico con un palo como guía para acompañarlo al girar sin que se caiga.
Se pueden hacer muchos juegos con él: organizar carreras, hacer circuitos cada vez más complicados, o cronometrar tiempos.
¡Y todo con sólo un aro! ¡Less is more!