Esta bonita cesta de mimbre se cuelga en la pared y tiene la función de almacenar pequeños objetos o utensilios que necesitamos tener siempre a mano.
Puede ponerse en la habitación de los más pequeños junto a la cama, para que allí guarden sus cosas importantes. Y también es ideal para la habitación de los adultos. En realidad, ¡en cualquier rincón de la casa quedará perfecta y le dará un toque acogedor!
Cada cesta es diferente, porque es el trabajo manual de un artesano que ha dedicado años a hacer de algo tan simple una obra de arte natural.
El laborioso proceso de lijar delicadamente el mimbre y prepararlo para pintarlo hace que el color dure años y no se desvanezca con el tiempo. Esto se debe a la pintura al agua ecológica, hecha expresamente para fabricar estas cestas. No contiene toxinas, es segura para los niños, los animales y el medio ambiente, y es muy duradera.
NOTA: En función de la configuración de cada monitor y de la tarjeta gráfica utilizada, es posible que las imágenes del producto no se correspondan al 100% con la realidad.